Tepeaca, epicentro nacional del robo de gas LP
El gobierno que asumirá Alejandro Armenta Mier el 14 de diciembre enfrenta varios desafíos en materia de seguridad. Más allá de los delitos de alto impacto que han acaparado la atención en redes sociales y medios de comunicación, la situación en la zona metropolitana de Puebla sigue siendo crítica, con la plaza manteniéndose caliente para el próximo gobierno. Además, hay delitos que no han mostrado una disminución durante todo el año y las expectativas indican que esta tendencia continuará en lo que resta de 2024.
Uno de los mayores problemas es el robo de gas LP. Puebla ha permanecido entre los primeros lugares en robos de gas LP durante todo 2024, y ha competido con Hidalgo por los primeros puestos en robo de hidrocarburo. El municipio de Tepeaca, originario del gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina, sigue encabezando la lista a nivel nacional en cuanto a tomas clandestinas de gas LP.
Entre enero y septiembre de 2024, Tepeaca reportó 140 tomas clandestinas, un número alarmante para un municipio en el que el gas ilícito es más común que el chicharrón carnudo. Sin embargo, la situación es aún más preocupante si se observa la cifra global. Según el Instituto de Gestión, Administración y Vinculación Municipal (IGAVIM), hasta septiembre de 2024, Puebla mantenía 9 municipios dentro de los primeros 20 a nivel nacional con el mayor número de tomas clandestinas de gas LP.
La lista de municipios con mayor incidencia de tomas clandestinas (hasta septiembre 2024) es la siguiente: Tepeaca (140), Tlalancaleca (53), Tlahuapan (38), Los Reyes de Juárez (35), Acajete (24), Amozoc (20), San Salvador El Verde (14), Acatzingo (10) y San Martín Texmelucan (8). Es alarmante que Tepeaca, con 140 tomas, triplique al siguiente municipio con más tomas clandestinas en Puebla.
¿Qué ocurrió en Tepeaca en 2024 para que se convirtiera en el principal foco de robo de gas LP? ¿Quién permitió el crecimiento de esta actividad ilícita en la región? En el contexto del Triángulo Rojo, donde diversos aspectos criminales se entrelazan, el robo de gas LP no es el único delito que ha aumentado. También se ha incrementado el robo de carga, lo que ha generado situaciones complicadas, como el atentado contra Adrián López Cavita, exdirector del Grupo de Operaciones Especiales (GOES) de la Policía Estatal.
El 14 de noviembre, López Cavita fue atacado por miembros de la delincuencia organizada mientras se encontraba en una estación de gasolina. Llevaba consigo 400 mil pesos en efectivo, y ya existían sospechas sobre su vinculación con actividades ilícitas en la región, especialmente en Tepeaca, donde controló la plaza durante años.
Afortunadamente, López Cavita sobrevivió al ataque, pero la Fiscalía General del Estado ha abierto una investigación, no solo sobre el atentado, sino también sobre el origen de los 400 mil pesos y los posibles vínculos con quienes intentaron recuperarlos. La corrupción dentro de la Policía Estatal en relación con el robo de gas LP y el robo de carga parece ser más extensa de lo que se pensaba.
En Tepeaca, también se ha dado un relevo generacional en las bandas de robo de gas. Roberto N., alias “El Colorado”, un ex carnicero que se introdujo en el negocio del robo de gas y combustible, cedió el liderazgo a su hijo debido a problemas de salud, pero el grupo delictivo sigue operando sin dificultades. El hijo de “El Colorado” ha revitalizado el mercado negro de gas LP con su flotilla de pipas, que incluso llegan a la zona metropolitana de Puebla.
Este es solo uno de los problemas que el nuevo gobierno de Alejandro Armenta Mier tendrá que enfrentar y depurar en su gestión.